Tête de femme laurée.
Anonyme
Esta cabeza es el único vestigio con rostro del decorado arquitectónico del anfiteatro antiguo que ha llegado hasta nuestros días.
Fue descubierta el 11 de septiembre de 1885 junto a numerosos fragmentos esculpidos, restos de cornisa, columna con escamas, capitel compuesto y dórico. Sin duda, se trata de una de las estatuas del frente escénico, el scaenae frons, decorado con una alternancia de hornacinas rectangulares y semicirculares. En estas hornacinas se colocaban representaciones de alegorías, de dioses o de miembros de la familia imperial, que gozaban de un estatus divino que les autorizaba a portar la corona de roble.
Las Arenas de Lutecia, fue un edificio mixto, esto es, anfiteatro con arena y, al mismo tiempo, teatro con escenario, y se sitúa por sus dimensiones (130,40 x 100 m) entre las edificaciones para espectáculos más grandes de la Galia, justo por detrás de Arles o Nîmes. El monumento, fechado a finales del siglo I, se descubrió en 1869, se excavó en reiteradas ocasiones hasta 1883 y posteriormente se sometió a un proceso de conservación y restauración. Todavía se puede visitar en el n.o 47 de la Rue Monge en el Distrito 5.